Este sábado 31 de mayo a las 11:59 p. m., un capítulo importante en la historia aeroportuaria del Perú se cierra con el cierre oficial del aeropuerto Jorge Chávez, ubicado en la avenida Elmer Faucett. Esta medida responde al inicio de operaciones del nuevo terminal aéreo, situado en la avenida Morales Duárez, un espacio moderno diseñado para responder a la creciente demanda y mejorar la experiencia de millones de pasajeros que transitan cada año por Lima.
¿Quiénes están involucrados?
Lima Airport Partners (LAP), empresa concesionaria encargada del manejo y operación, garantiza una transición organizada y segura hacia esta nueva infraestructura. ¿Qué está pasando? Se realizará una pausa operativa de vuelos desde la 1:00 a. m. hasta la 1:00 p. m. del domingo 1 de junio para trasladar equipos y asegurar el correcto funcionamiento del nuevo terminal.
¿Dónde? Todas las operaciones aéreas se trasladan al nuevo aeropuerto con ingreso exclusivo por la avenida Morales Duárez, en el Callao, que cuenta con ocho carriles (cuatro por ida y cuatro por vuelta) y acceso exclusivo vehicular dado que caminan más de tres kilómetros desde avenidas principales hasta su puerta principal.
¿Por qué este cambio? Además de aumentar la capacidad—se proyecta atender más de 30 millones de pasajeros al año—esto responde a necesidades urgentes como desahogar la congestión vehicular tradicional y modernizar los estándares internacionales que exige nuestra capital como punto estratégico en Sudamérica.
¿Cómo funciona ahora el acceso? Únicamente por vehículo particular o transporte público autorizado. ¡Atención! Habrá multas estrictas para vehículos que superen los diez minutos en zona de desembarque (40 soles). Esto reafirma el compromiso con un flujo vehicular ordenado y seguro.
Entre las novedades destaca AeroDirecto, un sistema innovador integrado por cinco rutas desde puntos estratégicos (Los Olivos, Galerías Brasil, Plaza San Martín, Quilca y Ventanilla) que facilitarán a usuarios conectarse con otras líneas urbanas para llegar sin contratiempos ni sobrecostos al nuevo terminal.
Esta transformación representa sin duda un salto cualitativo para todos los peruanos viajeros: más comodidad, mejor infraestructura y mayor eficiencia logística combatiendo demoras históricas e inseguridades.
0Comentarios