Una lamentable escena de discriminación se registró en un bus del Metropolitano, donde una mujer protagonizó un episodio cargado de insultos racistas contra otros pasajeros. A pesar de compartir el mismo transporte público que todos los presentes, la mujer elevó la voz con frases ofensivas como “Serranos son y serranos morirán”, evidenciando una actitud de desprecio hacia quienes viajaban a su lado.
“Les duele, porque como todos son unos serranos les duele que les digan la verdad. Así es, les duele pues serranos. Serranos son y serranos morirán. Serranos son y serranos morirán. Serranos son y serranos morirán. Así es, serranos son y serranos morirán. Que les duele. Que les duele. Toda mi familia es de Lima. Llamas y alpacas”, dijo la mujer contra pasajeros.
Resulta cuestionable que, siendo usuaria del mismo servicio masivo, pretenda marcar una diferencia basada en prejuicios raciales y sociales. Todos los pasajeros, sin excepción, acceden al Metropolitano bajo las mismas condiciones, lo que hace aún más contradictorio y reprochable que alguien intente denigrar a los demás usuarios con expresiones cargadas de odio y discriminación.
Este tipo de conductas no solo generan malestar en el ambiente público, sino que también reflejan un problema más profundo: la normalización de actitudes racistas en espacios cotidianos. El respeto debe primar en cualquier circunstancia, más aún en servicios donde todos comparten un mismo espacio. La discriminación, venga de donde venga, no tiene cabida en una sociedad que busca igualdad y convivencia armónica.
Según los usuarios de las redes sociales, se trataría de Ale Argumedo, quien ya bloqueó todas sus redes sociales. Además colabora en el podcast de YouTube“Hinchas Al aire”. Muy devota del Señor de los Milagros e hincha de Alianza Lima.
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